La ecografía mamaria es una prueba de diagnóstico por imagen que utiliza ondas de ultrasonido para crear imágenes detalladas de los senos. Esta prueba puede ser utilizada en conjunto con la mamografía y la exploración física para detectar anormalidades en los senos y para ayudar a diagnosticar afecciones como los quistes, los tumores benignos y malignos, y otras enfermedades del tejido mamario.
¿Qué detectamos en la ecografía mamaria?
La ecografía mamaria es una herramienta útil para detectar anomalías en los senos, especialmente en mujeres jóvenes y en mujeres con senos densos. Sin embargo, no debe utilizarse como un reemplazo de la mamografía o de la exploración física. Es importante que las mujeres hablen con su médico sobre cualquier inquietud o pregunta que tengan sobre la ecografía mamaria antes de someterse al examen.
¿Cómo es el procedimiento?
Durante la ecografía mamaria, la paciente se acuesta en una camilla y se le pide que se descubra la parte superior del cuerpo y que se coloque una bata o una toalla sobre los hombros. El técnico o médico aplica un gel lubricante en la piel del seno y utiliza un transductor de ultrasonido para enviar ondas de sonido de alta frecuencia al seno. Estas ondas rebotan en los tejidos del seno y crean imágenes en una pantalla de computadora.
¿Qué tiempo dura el procedimiento?
La duración del examen varía dependiendo de la complejidad de cada caso, pero generalmente dura entre 15 y 30 minutos. El examen es indoloro y no invasivo.